Descripción enviada por el equipo del proyecto. La parcela se sitúa en el Puerto Deportivo de Gijón, en un relleno que se le ganó al mar mediante la construcción de un nuevo dique que creó un espacio triangular de 5.900m² donde se construyó el edificio.
El edificio proyectado, prácticamente rodeado por el Mar Cantábrico, adopta perfil de proa curva hacia el mar, ofreciendo al oleaje y al viento del Norte, una piel dura e impermeable. Hacia el sur y la playa, mediante un muro cortina de vidrio, ofrece un espacio recogido, abrigado y soleado al que se abre para captar el máximo de calor y luz posibles. Se genera así una forma orgánica que se ofrece a ser contemplada desde todo el borde de la ciudad.
El edificio lleva a cabo su caracterización en el entorno mediante los materiales que lo configuran: Pizarra verde y dorada en grandes piezas, como fachada hacia el mar que transforma su color con el agua y refleja el sol y el mar y sorprende por el carácter camaleónico de un material pétreo; vidrio hacia el sur, reflejando y absorbiendo el sol durante el día y convirtiéndose en linterna nocturna en el extremo del dique durante la noche. Se planteó un desarrollo funcional basado en cinco actividades: Centro de Talasoterapia, Centro termo-lúdico, Complejo Deportivo, Clínica de Fisioterapia y Restauración.
En la zona con vistas al mar se sitúa el área de descanso. Desde este espacio se accede a la terraza exterior, en la que una lámina de agua comunicada con el interior permite tomar baños calientes en el exterior del solarium.
El Centro termo-lúdico ocupa el espacio central y consiste en una gran lámina de agua dulce diseñada para todo tipo de actividades relacionadas con el agua. Tiene diversas zonas con usos específicos: Piscina de olas, tobogán de45 m de recorrido, río de corriente rápida, piscina de chorros, aquagym y natación. Uno de los vasos tiene continuidad en el exterior, pudiendo salir nadando en agua caliente durante los días invernales.
La orientación de la parcela al Sur (soleamiento), fundamentó la concepción del edificio en su eficiencia energética y aprovechamiento adecuado del potencial de la parcela y sus recursos energéticos naturales (sol, agua de mar). Se planteó un volumen compacto con forma curva que garantiza la mínima superficie de fachada posible, con lo que las pérdidas térmicas directamente proporcionales a la superficie de fachada se reducen al mínimo. Esta fachada es cerrada hacia el Norte, hacia el frío y el viento, elementos determinantes en las pérdidas térmicas; al mismo tiempo, se abre al sur, de manera que un muro cortina de vidrio capta la mayor cantidad de luz y calor solar durante el máximo número de horas diarias, y disminuye las necesidades de iluminación y aporte de calor. Se dispone de un sistema de captación de calor mediante 71 paneles solares térmicos que se utilizarán como calentamiento de apoyo de vasos de la piscina y de producción de agua caliente sanitaria.